Comencé con los entrenamientos de manera muy organizada y apegado al programa. Al llegar al primer mes ya sentía que podía con cualquier distancia, al término de los entrenamientos no me sentía agotado, así que me confié. La primera lesión que tuve fue después de hacer una carrera larga de 12 km, ese día corrí por la mañana como acostumbraba y termine antes de las 9am. Me sentía en excelentes condiciones, asi que comence a realizar las actividades cotidianas que estaba acostumbrado a realizar, no descanse nada y aunque ya no hice ninguna actividad física fuerte, tampoco me tome el tiempo de reposar, estuve caminando y cargando cosas del súper, nada fuera de lo normal, pero algo no iba bien, una de mis pantorrillas comenzó a darme molestias y conforme me movía aumentaba el dolor, al grado de que para la noche caminaba cojeando. Me acosté pensando que al otro día ya estaria mejor pero no fue así. El dolor persistió, no era constante, únicamente lo sentía cuando caminaba, ese día me fui con dolor al trabajo, casi no me moví para evitar las molestias. En la tarde, seguía cojeando, me espanté y pensé que me había pasado algo grave, ya eran más de 24 horas y el dolor no se iba. Dr Google me dio las respuestas que necesitaba, lo que sucedió fue lo siguiente: la falta de reposo después de una sesión de carrera larga ocasionó que los músculos de la pantorrilla se lesionaran; el tratamiento consistió en aplicar frío al área afectada cada 2 horas y evitar cualquier actividad física por 3 días. Por fortuna, estuve a tiempo de no complicar más la lesión y me cure muy rápido, retome gradualmente el entrenamiento, me llevo una semana y media regresar al nivel previo a la lesión. La lección aprendida fue tomar seriamente el tema del reposo, no importa que te sientas bien, debes reposar para que el cuerpo se recupere al 100%.
La segunda lesión se presentó en la semana 7 del entrenamiento, en esa ocasión tuve molestias en la rodilla, ya había aprendido que ante cualquier anomalía debía suspender inmediatamente el entrenamiento y revisar que estaba causando el problema. La rodilla solo me molestaba al correr, podía caminar normalmente y andar en bici, pero no podía correr, inmediatamente comenzaban las molestias. Nuevamente recurrí a Dr. Google y el diagnóstico fue el siguiente: necesitaba incrementar la fuerza de los músculos, la rodilla estaba realizando un esfuerzo extra al correr. Tratamiento: incluir sesiones de gimnasio para fortalecer el cuerpo y combinar con natación, Tarde una semana en volver a correr, las molestias desaparecieron y me sentí mucho mejor en los entrenamientos. Aprendizaje: entrenar para un maratón no es solo correr y correr, es muy importante incrementar la fuerza de todos los músculos y relajarlos con natación.
La tercera lesión que tuve fue muy rara. El nivel del entrenamiento estaba para realizar un medio maratón, pero justo una semana antes de correrlo, suspendí la actividad física, al tercer día de no hacer nada de ejercicio, una molestia en mi espalda comenzó a notarse por la noche, al principio pensé que se debía al estrés del trabajo y que solo necesitaba relajarme, así que no le di importancia. Al siguiente día al levantarme el dolor al moverme ya era muy evidente, era como si me hubiera golpeado la espalda. Me fui al trabajo esperando que el dolor se calmara con la actividad pero no cedia. Esta vez consulte con mi Dra de cabecera, le dije todos los síntomas y el diagnóstico fue: tu cuerpo resintió la falta de actividad física elevada, los músculos se "cristalizaron". El tratamiento consistió en aplicar calor al área afectada y comenzar a realizar ejercicio de manera leve por una semana. Al aplicar calor inmediatamente observe resultados, el ejercicio que hice fue solo nadar, para el domingo ya esta listo para correr el medio maratón y las molestias en la espalda no se aparecieron para nada.
Al final del medio maratón se presentaron calambres en ambas piernas, específicamente en las pantorrillas, afortunadamente fueron muy breves y pude seguir corriendo y terminar la carrera.
En conclusión, la mayor parte de las lesiones pueden evitarse observando estas reglas básicas:
* El entrenamiento debe ser gradual y debe contemplar tiempo de recuperación
* Es muy importante incluir rutinas con aparatos para incrementar la fuerza en todo el cuerpo
* El entrenamiento también es una oportunidad para probar outfit, de esa manera sabrás qué es lo que mejor te acomoda para correr de manera cómoda y segura
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