Sin pensar

Aún me siento sorprendido, así sin pensarlo, sin sospecharlo siquiera, ahora tengo una vida tranquila y feliz. Después de buscar, tropezar y tocar las puertas incorrectas, se me presenta una puerta abierta, ahí estuvo desde hace muchos años, pero no sabía que era para mi. 

Me sorprende que seamos tan compatibles, que tengamos los mismos ideales y los mismos gustos, me sorprende que nos entendamos tan bien y de manera sencilla. Una relación donde tenemos todo sin pedir nada. Me sorprende que sea tan fácil vivir en paz en armonía. 

Sólo hace falta vivirlo, creérmelo y por supuesto que estoy dispuesto a ello. Ambos pensamos que nos lo merecíamos, sólo era cuestión de tiempo, y ese tiempo al fin ha llegado...