Si yo fuera extraterrestre

Soy un ser originario de una galaxia muy distante y tengo curiosidad de conocer ese pequeño planeta azul, varios conocidos me dicen que se encuentra en estado primitivo y puede ser divertido conocer formas de vida que aun están contenidas en su propio planeta.

De primera vista me doy cuenta que este mundo está rodeado de un liquido que le da un color azul al planeta, es el elemento más abundante, así que deduzco que los especímenes más evolucionados viven principalmente ahí. Visito las partes más profundas y me doy cuenta que existen muchas formas de vida conviviendo en comunión y en un equilibrio precario. Pero no encuentro una civilización dominante. Me topo con organismos que van desde lo microscópico hasta lo enorme, pero no una raza superior tecnológicamente. Trato de comunicarme con los seres más inteligentes para saber como es su experiencia viviendo en este planeta, resulta sencillo tienen un sistema básico de comunicación sensorial. Me informan que es un mundo muy bueno para habitar, la temperatura promedio es muy agradable y que se puede viajar sin mayor problema usando las corrientes que se forman en todo el globo. Me recomiendan conocer las zonas polares y me comentan que la vida es abundante en todo el planeta. Me hablan de la cadena alimenticia y de la evolución de las especias de acuerdo a los diferentes climas del mundo. Me explican de las tormentas, de las migraciones de algunas especies y dicen cuanto tiempo lleva el planeta ocupando por seres vivos. Compruebo que es un planeta sumamente joven. 

Una vez satisfecha mi curiosidad por la vida en el elemento liquido pregunto si vale la pena conocer las partes solidas. La respuesta es que la vida abunda tanto en el elemento liquido como en el solido y en este ultimo existen muchas especies que en general se conducen con las mismas normas que ellos, sin embargo saben de la existencia de unos seres hostiles que acostumbran modificar su entorno natural y que ellos no terminan de entender la razón de esas costumbres, así que los evitan aunque resulta difícil porque se reproducen rápidamente y son muy adaptables a todos los territorios y aunque no pueden vivir propiamente en el agua si llegan a internarse frecuentemente en el mar con los mismos propósitos: modificar la naturaleza. Esto despierta mi curiosidad por la raza hostil, así que les pido su recomendación para acercarme a ellos. Tratan de disuadirme diciéndome que nada bueno se puede aprender de seres que no respetan la vida y el entorno. Pero yo les digo que seguramente son seres primitivos que solo necesitan educación y conocimiento. Así que lo tomo como un reto. 

Un rápido análisis de población me lleva a determinar cuales son los lugares en donde existen las mayores concentraciones de población. Interesante: existen varias franjas muy pobladas en varias regiones del mundo, seguramente son los mejores lugares para desarrollarse. 

Comienzo mi expedición por el lugar de más concentración en el mundo, le dicen ciudad de Tokio. Ya ha pasado mucho tiempo desde que establecí contacto con los habitantes de Tokio, me costó trabajo comunicarme con ellos porque utilizan algo llamado lenguaje que depende de sonidos realizados mecánicamente con una parte de sus cuerpos, aun no han llegado a comunicarse por ondas cerebrales así que constato que los seres más evolucionados son los que habitan la parte liquida del planeta. El lenguaje de sonidos forma palabras pero con eso no pueden comunicar pensamientos ni sentimientos, están muy limitados en ese aspecto. Aun con esas limitantes ya he podido averiguar muchas cosas de su sociedad, por ejemplo ahora sé que modifican su entorno natural para crear cosas, aunque aún no entiendo para que necesitan las cosas que crean, me doy cuenta que las aprecian mucho pero no entiendo que finalidad tienen al acumular todo tipo de cosas nuevas. Me di cuenta que tienen un alto grado de organización, unos pocos dictan ordenes y muchos otros las obedecen, es raro que funcionen de esa manera tan inequitativa, no entiendo porque cada quien no hace simplemente lo que necesita hacer, su organización se torna compleja porque los pocos que dan ordenes requieren grandes grupos que vigilan que el resto cumpla con las tareas encomendadas. Los objetivos de las tareas no son aun muy claros para mi, no son tareas en beneficio de la comunidad o el entorno, son tareas que al parecer solo sirve para continuar creando cosas nuevas. La organización es eficiente pero no tienen desarrollado el sentido del bien común, solo es fuerza bruta de trabajo, energía desperdiciada sin ningún tipo de control. 

Después de Tokio he visitado más poblaciones y las costumbres son muy similares, cambian su lenguaje pero no modifican su afán de crear y acumular cosas. Dejando a un lado la acumulación, la creación de cosas los ha llevado a desarrollar un conocimiento rudimentario del universo, más a fuerza de prueba y error que al razonamiento mental, no se han dado cuenta que todo el conocimiento lo pueden obtener directamente del intelecto y no de la fuerza bruta. Para trasladarse de un lugar a otro utilizan reacciones químicas, es divertido ver lo ingeniosos que pueden llegar ser, en su ignorancia se han atrevido a salir de su planeta usando maquinas muy frágiles, interesante que ver como suplen el conocimiento con su estupidez. 

Nunca será lo mismo revisar la historia de la evolución a experimentar uno mismo los albores de las civilizaciones inteligentes, no hay manera de describir los sentimientos que genera presenciar una guerra entre seres vivos, debido al grado de atraso en el que se encuentra esta civilización es muy probable encontrar una guerra en progreso en muchos lugares del planeta. El nivel conciencia general debe ser casi nulo en la medida en la que no se percatan que las guerras y el acto de terminar con una vida de manera premeditada es completamente contrario a las reglas la naturaleza. 

Esta primera visita ha resultado mucho más que solo divertida, creo que haré planes para regresar, tal vez dentro de unos 5 o 6 siglos, con suerte para ese entonces ya existirán seres evolucionados que me permitan continuar con mi ejercicio de experimentar la evolución de una civilización primitiva.