Últimamente he estado de buen humor, no hay una razón especifica para ello, es simplemente que estoy de buenas, es más si lo pienso bien no tendría porque estarlo: el trabajo igual (pendientes y mas pendientes), el aumento de sueldo no llega, las vacaciones se ven muy lejanas, deudas interminables, etc. Y a pesar de todo estoy de buenas, extraño pero así es.
Las cosas las veo ahora muy simples: cuando me despierto, me da flojera pararme pero me digo “que diablos, mejor ir a trabajar que quedarse en la cama sin hacer nada”, llego al trabajo y simplemente comienzo a hacer lo que tengo que hacer y el día se pasa rapidísimo. Los fines de semana que me toca ver a Diego voy por él, sin prisas y sin presiones, lo disfrutamos mucho, los fines de semana que tengo para mi, me pongo a caminar o a leer o a hacer ejercicio. Los miércoles me voy solo al cine solo por el gusto de hacerlo. Es algo difícil de explicar, es como comenzar a dimensionar que el futuro por más que se planee es incierto y más vale vivir el presente. Sé que esto es una etapa, que el día de mañana las cosas nuevamente serán complicadas o difíciles, pero mientras ese día llega ¿para que me preocupo?
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