jueves, enero 11, 2007

Chelo Prieto

Nunca he sido aficionado a la música clásica, realmente soy un ignorante en cuestiones de musicales. Así que el libro de Carlos Prieto me esta abriendo un mundo completamente nuevo para mí. Ya me entro mucha curiosidad por acercarme a los conciertos, en la primera oportunidad que tenga asistiré a alguno. Aquí les dejo algunas cosas que me han sorprendido bastante.

Los instrumentos musicales realizados por Stradivarius son considerados obras de arte porque presentan cualidades que hasta la fecha no se han podido igualar, tienen sonidos muy particulares que hacen que se les atribuya un carácter propio. Afortunadamente Stradivarius fue muy prolífico y actualmente existen muchas piezas de su autoría, en su mayoría violines, los violonchelos son los menos y por eso es muy raro que en un concierto se tenga la oportunidad de escuchar a uno de ellos. Un contemporáneo de Stradivarius -que también tenía un gran talento para el oficio de la laudería- fue Guarnerius, por desgracia el trabajo de este ultimo fue muy escaso y en el mundo quedan muy pocos instrumentos de él (imagínense ahora lo difícil que será escuchar alguna vez un instrumento de Guarnerius).

Según expertos, existe un tiempo de maduración para que un instrumento (de cuerda en este caso) muestre todo su potencial, para los instrumentos hechos por Stradivarius se maneja que tuvieron que pasar entre 80 y 100 años para que pudieran ser apreciados en todo su esplendor. Así que en un principio, ni Stradivarius ni Guarnerius, eran tan solicitados por los músicos profesionales de aquella época.

Los violines, violas y violonchelos van adquiriendo fama por dos cuestiones: su sonido particular y la persona quien los toca. En el caso del violonchelo que actualmente es propiedad de Carlos Prieto, alguna vez fue propiedad de un gran músico italiano llamado Alfredo Piatti, fue tal el reconocimiento de este artista que al violonchelo se le asocio el nombre del Piatti. Sin embargo, Carlos Prieto (que a lo largo de su carrera a alcanzado fama mundial) ahora le llama cariñosamente a su instrumento Chelo Prieto y seguramente, con el tiempo, así será reconocido en todo el mundo.

Pues aquí dejo este breve resumen de lo que llevo leído hasta ahora. Espero haberles despertado la curiosidad.

3 comentarios:

Lizette S dijo...

Ahh pues si se ve muy interesante el libro. Yo a duras penas se como es un chelo jajaja, pero si que está interesante el libro.

Anónimo dijo...

A mi si!!
Quiero tomar clases de violin a mediados de a~o...
Feliz casi inicio de fin de semana!!!

Anónimo dijo...

Pues si que suena bastante interesante y quiza seria tambien muy padre conocer toda la historia que hay detras de cada uno de esos instrumentos que han pasado de generacion en generacion (algo asi como la pelicula del "Violin Rojo".

Saludos