El futuro

Por fin esta semana las cosas en el trabajo se han relajado bastante, así que tengo tiempo de saludar a mi buen amigo el ocio. Estaba leyendo (más bien escuchando una especie de documental futurista muy bueno) y me dieron ganas de escribir del futuro, así que ahí voy.

En una década las computadoras ya no serán más como las conocemos, ya no serán solo parte de la vida cotidiana, más bien serán parte de nosotros mismos, las tendremos implantadas en nuestro cuerpo, despídanse del teclado, el mouse y el monitor. Nuestros ojos tendrán incorporado una pantalla tridimensional que vendrá a ser una nueva forma de visión. El acceso a Internet será permanente y por supuesto inalámbrico y con alcance en todo el mundo, nuestro cuerpo hará las veces de antena receptora/transmisora. La conexión permanente a Internet permitirá que en caso de estar enfermos (las enfermedades de hecho serán muy raras, gracias a la genética) establezcamos comunicación con algún centro de diagnostico el cual evaluara (desde donde nos encontremos) nuestro estado de salud y en caso de requerir medicamentos, estos se ordenara de manera automática, con cargo a la línea de crédito universal. Ya no habrá librerias, solo existiran centros de datos. No se utilizará la comunicación impresa. Poco a poco iran desapareciendo las filas para pagar los artículos de consumo, todos los pagos se realizaran en línea, si requieres de algún servicio publico como transporte el paso por los torniquetes detectara inmediatamente al sujeto, no será necesario comprar un boleto para viajar. Ya no tendremos que cargar con el celular, nuestro oído estará acondicionado para recibir llamadas que mas bien serán videoconferencias. En este mismo siglo utilizaremos nuestro cerebro como una extensión de la computadora, será el medio de almacenamiento por excelencia, ayudara a los microprocesadores incoporados al cerebro a desarrollar nuevos algoritmos de autoaprendizaje de tal forma que cada vez serán más potentes. ¿Como se evitaran los fraudes?, los códigos de encriptación utilizaran el mismo ADN del individuo para cifrar la información. Los índices de criminalidad a mediados de siglo habrán llegado a sus niveles mínimos, gracias a la manipulación de genes, se eliminaran desde la concepción, cualquier gen que tenga que ver con conductas agresivas y dañinas al medio ambiente.

Tendrán que pasar todavía algunas generaciones más para que los actuales sistemas económicos que conocemos desaparezcan en su totalidad, ya no habrá países, solo regiones. Con la ayuda de las computadoras instaladas en nuestros cuerpos desarrollaremos las aptitudes que cada quien lleva pero que en la actualidad son difíciles de encontrar o en otras palabras, las computadoras nos ayudaran a enfocarnos en lo que somos buenos y nos gusta hacer. En conjunto toda la humanidad se enfocara a desarrollar los sentidos, se tendrán nuevas formas de interacción, existirá un solo idioma, sin embargo, en una charla lo corriente será utilizar la telepatía. La riqueza excesiva estará prohibida y de hecho no será del interés de las nuevas generaciones las cuales estarán orientadas a buscar el contacto con civilizaciones extraterrestres, a los viajes multidimencionales y al desarrollo de la conciencia. El dinero dejara de existir (ya no tendra razón de ser) para dar paso a la producción colectiva.

Se descubrirá que hay otras formas de vida en planos diferentes a los que conocemos (actualmente 4 dimensiones), aprenderemos a viajar por medio de una quinta dimensión. En nuestro planeta conviviremos con seres incorpóreos (mejor conocidos como fantasmas) los cuales también habitan en diferentes dimensiones.

Descubriremos la razón de que el planeta este compuesto de 3/4 partes de agua y aprenderemos a hacer uso adecuado de los medios naturales. Hallaremos el papel que jugamos dentro del universo y nos avocaremos a cumplirlo.

Todo esto será en este siglo, de tal forma que en el siglo XXIII seremos totalmente irreconocibles a como somos actualmente.

Bueno, soñar no cuesta nada... ¿verdad?